Por fin, tras largas deliberaciones, el Tribunal Supremo ha negado el derecho a la objeción a Educación para la Ciudadanía. Con 22 votos a favor y 7 en contra. Lo cual, mayoría aplastante, demuestra que con dicha asignatura no se intenta acabar con la religión, sino potenciar ciertos valores sociales y así lo ha entendido el Supremo.
Los colectivos LGTB siempre hemos defendido que nuestra lucha continua con la educacion, educacion en tolerancia, sin sectarismo ni por supuesto adoctrinamiento. Y es que como bien defendíamos los colectivos, con la asignatura de Educación para la Ciudadanía se fomentaba el respeto.
Con dicha materia se espera que se eduque a futuras generaciones libres de racismo, xenofobía y de homofobia. Ayudarles a tener unos valores y unos principios que les hagan ser buenos ciudadanos. Por unos motivos o por otros, a ciertos padres y madres, ciertas familias y ciertas formas de pensar, esta asignatura no les parecía correcta ni apropiada y que atacaba a sus creencias religiosas.
Así que estos padres, acogiéndose en la objección de conciencia, decidían que sus hijos no iban a recibir esa asignatura. Cosa tan absurda como si uno tuviera unos padres que no creyeran en la evolución e hicieran objeción para que uno no estudiara Ciencas Naturales.
Ademas siempre acusan los que menos deberian, o empezar a enseñar religión a los niños de cinco años no es adoctrinar!!! Aunque podriamos usar otras frases que nos callaremos para no herir susceptibilidades.
Pero bueno siguen dando la batalla, ahora hablan de denunciar los libros de texto. Nuestra lucha continua.
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